El Gran Maestro Ascendido a quien han llegado a conocer como Cha Ara, antes de ascender, primero invocó a través de la sustancia externa convocada y luego a través de precipitación, aquello en lo que el mundo ha llegado a pensar -los hombres no lo entienden, pero han llegado a pensar en ello en términos de Elixir de Vida. Tal ha sido el caso a lo largo de los siglos.
A menudo Cha Ara se lo daba a personas, y en pocos días el cuerpo en su totalidad era transformado de un dolor inaguantable a liviandad, salud y felicidad. Esa Esencia, esa Sustancia entraba instantáneamente al torrente sanguíneo, y de la misma manera que ustedes han escuchado al Mensajero hablar de la Llama Violeta Consumidora que avanza y captura toda impureza en la sangre, cuando el Elixir pasaba el trabajo terminaba.
Ahora ustedes hoy, todos y cada uno de ustedes, podría comenzar a utilizar la Llama Violeta Consumidora, por ejemplo, como si se la tragaran y luego visualizaran eso -haciendo una imagen mental de esa Llama Violeta Consumidora pasando por su garganta al estómago, limpiando y purificando, prosiguiendo luego a través de los intestinos, atrapando toda impureza que allí pudiera encontrarse, limpiando y purificando y manteniendo el Dominio allí. Vaya, amados Míos, podrían auto-liberarse rápidamente de cualquier condición que alguna vez haya aquejado al cuerpo físico. Queremos que ustedes lleguen a sentir la plenitud de ese coraje, aceptación, fortaleza y confianza en su propia Aplicación, de manera que en el momento que alguna perturbación comience dentro de sus cuerpos, primero invoquen su "Presencia" a la acción para que saque de su mundo emocional la CAUSA de eso; luego, carguen desde sus pies hacia arriba, su Llama Violeta Consumidora. O, de ser necesario... ¡tráguensela! ¿Les suena peculiar esto?
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