En este mundo de la forma, el hombre, en su mayoría, ha escogido en todas sus religiones ubicar fuera de sí mismo sus maestros, sus santos, sus ejemplos y, así, se ha auto-separado de la Presencia Una adentro.
Al entrar profundamente en la paz y silencio de la contemplación activa, encontrarás que la Luz que emana desde La Presencia adentro elevará tu capacidad de percibir tu unicidad con Todo lo que es. Esto te permitirá hacerte consciente [aware] de tus hermanos.
La gran necesidad de Mis chelas consiste en tomarse el tiempo en esfuerzo contemplativo para hacer el significado de estas humildes comunicaciones Mías, parte de su naturaleza y sentimientos. Recuerden, amados Míos, que la transmisión del conocimiento desde el Cuerpo Mental al Cuerpo emocional es verdaderamente una transfusión como lo es cualquiera transfusión de sangre en la Tierra. A fin de incorporar el conocimiento aceptado de palabras fías y mecánicas a través del Cuerpo Mental al Cuerpo Emocional, se requiere de una callada e ininterrumpida contemplación de las Verdades presentadas.
El recibir la "comunión" en los servicios eclesiásticos se originó y diseñó para atraer la Esencia Espiritual —la Conciencia Crística— a través del aspirante. Abracen esta Conciencia —esta Unicidad adentro— piensen en Ella, siéntanla no sólo en sus momentos de culto sino como una encarnación consciente y constante que conforma el curso del patrón diario suyo.
El esfuerzo sincero de parte del chela para hacer del conocimiento y la instrucción una fuerza propiamente dicha mediante la cual él vive (y, repito, esto se hace mediante la contemplación de las Verdades presentadas) siempre lo atraerá a la Presencia de un Ser Ascendido.
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