Les ruego que nunca permitan que su mente revierta a nada que haya pasado. Si hacen eso, Mis Amados, en pocas horas se daría una tremenda Descarga. De nada sirve seguir trayendo de vuelta a la actividad de su mundo hoy, el resto de las cosas indeseables que han pasado. Es totalmente inútil... ¡y tremendamente perjudicial para muchos! ¡No lo hagan! Lo que pasó, ya pasó, siempre y cuando lo dejen ir para siempre. Lo que importa es lo que ustedes son hoy; ya que de lo que son hoy, estará hecho el mañana. Si traen el pasado al presente... ¡entonces el pasado se convertirá en el futuro!
¡Piensen, oh, Amados! ¡Piensen en lo que la humanidad ha estado haciendo durante tánto tiempo! ¡Dejen para siempre de traer el pasado a las condiciones del mañana, A TRAVÉS DEL PODER DE SUS SENTIMIENTOS. Tracen una línea poderosa detrás de ustedes... ¡y nunca más miren hacia atrás! Si algo indeseable ocurre en su vida, no comiencen a cuestionarse "¿porqué se activó eso?", ni "¿por qué habrá pasado eso?" Sencillamente digan: "¡Gracias a Dios que no fue peor! ¡Gracias a Dios recibí una Bendición! ¡Gracias a Dios que estuve protegido! ¡Una maravillosa Liberación y Bendición seguramente saldrán de todo esto."
Esta noche, decídanse como nunca antes en su Vida, a borrar por completo de su memoria todo aquello que ha pasado; y si han cometido errores, les ruego, por favor, que no se auto-condenen. Invoquen la Ley del Perdón... ¡y olviden el asunto para siempre! Oh, Mis Benditos, cuando ustedes de repente comienzan a concientizarse de los errores del pasado, no cometan un error aún mayor al agitar su atención sobre ellos. Sencillamente, con júbilo y acción de gracias, invoquen la Ley del Perdón, y digan: "Gracias Dios porque ya no tengo eso más." Luego, digan: »¡"Magna Presencia YO SOY"! ¡Asume el mando de mí, y está pendiente de que yo haga que eso no vuelva a ocurrir hoy ni nunca más!»---
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