sábado, 12 de febrero de 2011

DESCORRER EL VELO

Sonrío ante el deseo de los seres humanos de conocer el Plan, porque cuando se descorre el velo tan sólo un poquito... ¡el ser grita de horror al ver el Sendero! Por esta razón el "velo" que el chela tanto aborrece fue provisto como un acto de misericordia por Dios, para dulcemente ensombrecer el pasado en los dobleces aterciopelados del olvido, de manera que el alma no sufra a causa de las memorias de aquello que pasó; y por qué, ante el espíritu evolucionante, el Blanco Velo del mañana desconocido está rociado de estrellas con esperanza y promesa, velando "lo que pasará". Sólo los fuertes, por exigencia propia, hacen que se les descorra el velo y se yerguen contemplando lo que ha sido, lo que podría ser y lo que, en el curso ordinario del vivir... ¡será! Como Dickens t an bellamente describiera esta verdad en su Christmas Carol, lo que el hombre más teme es el "Espíritu de lo que vendrá".

¡Quiero pedirte que desarrolles las oportunidades que se te presenten! No anheles poderes mayores si no has utilizado a cabalidad los que tienes en las manos en la actualidad... ya que mayores poderes acarrean mayores responsabilidades. Mucho mejor librado saldrá el chela si descansa en su conciencia actual, en vez de que se le den talentos que su propia alma no puede incorporar (o no incorporará) en el servicio del día.

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